Quién puede negar que cada vez estamos en un mundo con más presión, más desafíos por cumplir objetivos (muchos de ellos impuestos) más velocidad en los cambios que nos impiden conocer cómo proceder sabiamente. Los médicos le llaman a esas consecuencia por vivir así “el estrés”.
Además, vivimos en Argentina, un lugar muy particular para estar “al palo” como dicen los jóvenes. Y es en medio de tanta presión y condiciones adversas, que necesitamos forjar nuestro futuro. ¿Te preguntaste cómo serán los días por venir si a tanto desorden económico-social le agregamos “una medida” de Covid19 no esperada?
A diario entrevisto personas que en base a los resultados pasan a ser mis clientes y con todos hablamos de lo mismo ¿cómo realizar un plan personal coherente ante la disyuntiva de vivir poco o vivir mucho? Y la mayoría no lo sabe. Después de hacer esto por casi 20 años, mi conclusión es que el resultado de tan alto índice de desconocimiento acerca del futuro en el área en que me especializo, ha sido por las malas experiencias vividas, por postergaciones continuas bajo la frase típica de “en el futuro lo haré”, por el temor a fracasar nuevamente ¿No te suena conocido el argumento de mi conclusión?
Lograr resultados, cumplir objetivos, mantener un propósito en medio de estos días es haber entendido muy bien que la perseverancia es una característica que todos necesitamos cultivar, así como el obrero necesita tener en buen estado sus herramientas, la perseverancia debe estar en las mejores condiciones para surfear las olas que a diario se nos oponen.
El diccionario dirá que la perseverancia es la “Firmeza y Constancia en la manera de ser o de obrar”. Dejame agregar también que es la fuerza de voluntad la que en momentos de flaqueza, cuando otros tiendan a abandonar, perseverar en el objetivo, nos mantendrá en el camino …
Se la debe considerar un valor sumamente importante para alcanzar los objetivos y metas que nos proponemos en la vida.
En el libro “Piense y Hágase Rico” Napoleón Hill dice que la base de la persistencia es la fuerza de voluntad impulsada por el deseo de lograr algo determinado.
«Cuando uno se ve presa de una frustración temporal, una de las causas más comunes del fracaso es el hábito de abandonar», dice Napoleón Hill.
Antes de que el éxito nos aparezca, es seguro de que éste se encontrará con muchas frustraciones temporales, y tal vez con algún fracaso.
Si estás pasando por una etapa en la que la frustración se está adueñando de tus pensamientos, rechazalos porque lo más fácil y a veces más lógico es abandonar. Por lo menos, es lo que la mayoría hace en esos casos …
Acordate y grabá esto en tu corazón: La perseverancia es un estado, una convicción que se libra en el campo mental y hasta espiritual, se puede cultivar !! O sea hay esperanza de mejorar, no importa en “el hoy” en que te encuentres !!
La clave una vez más es ser consciente de esto y equiparse, aprendiendo a ser perseverante y a rodearte de gente y medios que colaboren a desdarrollar este valor en tu vida !!